La tierra no es de color tierra, ni siquiera verde, desde lejos se la ve azulada.
El agua líquida se acumula en las depresiones terrestres y forma océanos, lagos y lagunas, o se desplaza en ríos y arroyos. El agua también la encontramos en estado sólido, por ejemplo, en los glaciares, en las altas cumbres nevadas. Suspendida en la atmósfera está el agua en estado gaseoso. Toda el agua de la Tierra forma la hidrósfera.
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